24 septiembre 2012

50 sombras de Grey



Acabo de terminar de leer el libro más comentado del momento. Lo leí en dos días y quede absorta en la historia. Más allá de si es un libro erótico, lleno de sensuales momentos y otros no tanto, me cautivó la manera en la que la autora describe a Christian Grey, el protagonista.

Sin dar muchos detalles del mismo, porque probablemente muchas no lo han leído (y digo muchas porque es casi seguro que el 99.9% de quienes lo han leído o lo leen son del sexo femenino), quiero dar mi punto de vista.

Yo conozco a un Christian Grey, a ese hombre que de solo mirarte te cautiva... Que en cuanto aparece en la luz parece un adonis y que solo de sentir su presencia te pone los pelos de punta. El mismo que al entrar a un lugar lo llena todo; la atmósfera cambia y lo único que puedes (o quieres) hacer es contemplarlo. El mío no tiene tanto misterio, es como es: simple, con un sentido del humor único y que me hace sonrojarme de mil y un formas. Aquí es cuando me pregunto ¿que mujer no conoce a un hombre así? Cautivador hasta mas no poder, con esa expresión en los ojos que te eriza la piel y te hace estremecerte hasta la médula. La boca se pone seca en un instante y las piernas se vuelven de gelatina... cuando te toca te provoca chispas y el cerebro se nubla y da mil vueltas hasta regresar a la tierra. No, no es un personaje de una trilogía, los hay de carne y hueso.

También reconozco un poco de la señorita Anastasia Steel en mi y aprendo un poco de como los hombres de verdad prefieren a una mujer de verdad. Si señores, el cortejo no cambia aunque digamos que no queremos "flores y corazones". Insisto, el romanticismo no ha muerto y en el fondo, todas las mujeres queremos ser así, amadas. De una u otra forma, correcta o incorrecta, pero amadas al fin.

Creo que el gran éxito de este libro es el mensaje, de querer encontrar el amor por más raro que esto pueda parecer en estos tiempos. El que queremos sentirnos aceptados por la otra parte y que muy a pesar de nuestro pasado y nuestros demonios, intentamos (o aprendemos) a jugar un rol dentro de una relación. No es necesario llegar a los limites de esa historia en particular, pero si deja claro que cuando uno busca "algo más" puede llegar a intentar serlo o incluso llegar a serlo.

Las diferencias entre la realidad y la ficción es corta. No porque una mujer sea "común" no puede enamorarse de alguien inalcanzable. No existen los príncipes pero si los caballeros de verdad. No existen los cuentos de hadas, pero si existe el amor verdadero por más retorcido que esto suene en este momento. 

Otra cosa que aprendí es que ser sumisa no es ser idiota. A los hombres les gusta tener el control, los hace sentir importantes, grandes, únicos. A una mujer de verdad no le importaría aceptar de ves en cuando dejarse querer, ese es el grave problema de nuestra generación. La independencia nos ha hecho un poco hostiles, controladoras y hasta diría que un tanto hoscas. ¿Que tiene de malo dejarse querer?. Por eso estamos como estamos, porque no queremos estar solas pero también queremos tener el control y demostrar que podemos "sin ellos". Chale...

Creo que ese es mi mayor problema y el de muchas. Hacemos tantas cosas solas, somos tan celosas de nuestro espacio, nuestro tiempo que cuando un hombre quiere cambiarlo, inmediatamente sacamos las uñas y decimos "yo puedo sola". No señoritas, si podemos, pero no esta mal que de vez en cuando alguien más lo haga. "Lo hago porque puedo"¡vaya que esa frase se me tatuó en el cerebro, porque ya la he escuchado antes y precisamente de mi versión de carne y hueso de Christian Grey. 

Me pregunto, ¿que hubiera pasado si hubiera sido un poco más como Anastasia y me hubiera guardado ciertos pensamientos para mi? ¿si hubiera firmado un contrato con mi propia mente y no pudiera abrir la boca de más?... Otra historia sería sin duda. 

En fín... es un libro digno de leerse y eso que apenas voy en la primera parte. No puedo esperar por leer la segunda. Dedique todo un fin de semana y no puedo más que recomendarlo al 100%. De verdad. Más que un Best Seller, es una revelación.

Ojalá encuentre a otro Christian Grey, menos retorcido pero igual de interesante.

Jimena